Washington, D.C. – La administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha decidido poner fin a los esfuerzos diplomáticos que se mantenían con funcionarios de alto nivel del gobierno venezolano. Esta información fue confirmada por fuentes oficiales en Washington al diario The New York Times, marcando un cambio significativo en la política exterior estadounidense hacia Caracas.
Las conversaciones estaban siendo encabezadas por Richard Grenell, Enviado Especial de la Casa Blanca y Director Ejecutivo del Centro Kennedy. No obstante, en el curso de una reunión con mandos militares el pasado jueves, el presidente Trump se comunicó directamente con Grenell y ordenó la interrupción inmediata de toda comunicación diplomática.
Motivaciones y Frustraciones Presidenciales
Según el citado medio, la decisión del mandatario responde a una frustración manifiesta por la falta de avances en las negociaciones. El presidente Trump se habría mostrado decepcionado ante la negativa de Nicolás Maduro a aceptar las exigencias de Washington para abandonar el poder y por la postura de sus representantes, quienes han negado sistemáticamente cualquier vinculación con el narcotráfico.
Fuentes gubernamentales indicaron al diario que el presidente ha considerado diversos escenarios militares para intensificar la presión sobre Caracas, incluyendo opciones diseñadas para forzar una transición en el liderazgo venezolano.
